Intento ser yo,
dejo ver, como presentación,
lo que te pueda sorprender
y mi sonrisa va dedicada a ti:
Salgo por encontrarte,
recabo las esquinas ocultas
por si andas escondido;
esquivo conversaciones
si no soy invitada y
aún así, te hablo.
Pero la sombra del miedo
me persigue mostrándome
los fracasados argumentos
que viajaron por mi tiempo.
No correré anhelando
la meta que me lauree,
ni obligaré al reloj
que acelere su marcha,
tan sólo esperaré
a que se ilumine el día.
6 comentarios:
Reme me conecté a tú blog hacia las una poco más o menos.
Y te dejo pasadas las dos agregando tu página (blgodfgsvbs... ufff)a mis favoritas.Lo que hacen unas cervezas.
Jose Miguel
No sé si me has agregado porque tenías unas cervezas encima o porque nos tomamos unas cervezas, pero...lo más importante ¿Te ha gustado? :-)Gracias por agregarme. Un besillo.
Me ha encantado,hasta el extremo de volver a leer cosas mias ( con lo quemado que estoy). Es una delicia para mi paladar adentrarme en otros mundos gracias a la magia de tus palabras.
Jose Miguel
¡Qué bonitooooo! Gracias por las tuyas, por tus palabras, por la deferencia de leerme y por expresar que te gusta; me ayudas a seguir.
Un besillo.
Me gustas (Titulo) solo esperaré a que se ilumine el día (final). Genial. Dan gansa de ser el objeto de tu deseo. Un "besillo" clandestino. Eduardo
Vaya mal rato que henos pasado hoy. Nos duele enfrentarnos al hecho de que existe gente sin corazón, verdad? Yo no estoy acostumbrado a ello. Será que la vida me ha dado pocos palos, he tenido suerte y tengo el lujo de mantenerme ingenuo. Edu
Ya ves que pienso que este poema no es de los mejores... Gracias, de nuevo, por tus comentarios.
¡Sí! Yo tampoco estoy acostumbrada a que que se piensen las cosas tan fríamente, sabiendo que hará mucho daño.
Un beso.
Publicar un comentario